Montiel
CRUZ
Debido ante las
constantes lluvias que han provocado los huracanes “Ingrid” y “Manuel” que ha
dejado a demás de su paso al menos cuatro muertos, unas 29 comunidades incomunicadas, puentes
colapsados y miles de damnificados en el Istmo de Tehuantepec, Sierra Sur y la
Región Mixteca, entre otras en Valles Centrales.
El vocero de la
Arquidiócesis de Antequera, José Guadalupe Barragán, lamentó que la Iglesia no
tenga recurso para apoyar a los damnificados por esta desgracia que están
pasando en Oaxaca y Guerrero.
Luego de la
conferencia dominical el día de ayer, el también sacerdote José Guadalupe
Barragán Oliva, pidió al gobierno del estado destinar los apoyos para los
hermanos que están desgracia ante las constantes lluvias y que no sean
condicionados dichos apoyos.
Ante esta desgracia
que están viviendo en Guerrero y Oaxaca, “tenemos que reflexionar y mirar todo
esto como un llamado fuerte del señor, a dejar egoísmos e intereses personales
o de grupo para atender primero las necesidades apremiantes de nuestros
hermanos que sufren de esta desgracia”.
Además, también
expuso que esta situación es un fuerte llamado a ser más justos, solidarios y
humanos como personas y como sociedad.
El llamado del
sacerdote fue en el sentido de promover desde las parroquias víveres enlatados,
ropa, colchonetas, todo lo que esté al alcance de las personas, particularmente
de los católicos, además de sumar esfuerzos y colaborar con autoridades civiles
y de gobierno para que los apoyos lleguen de manera afectiva y ágil a los
verdaderos hermanos en desgracias.
