Ocotlán continua siendo un pueblo violento, no garantiza una vida segura

Montiel Cruz

El presidente de la Organización de comerciantes “Dos de Mayo” que representa Sergio Federico Amador Hernández, aseguró que Ocotlán de Morelos, continua siendo un pueblo violento, no garantiza una vida segura para los ciudadanos de esta población que viven con miedo  y temor.

Lo anterior lo dio a conocer por la balacera que se registró el jueves pasado en la agencia municipal de Texas de Morelos, Ocotlán, que dejó como saldo un muerto en el momento cuando recibía atención medica en el Hospital de San Pablo Huixtepec y una persona lesionada.

De acuerdo al dirigente de locatarios de este poblado, la situación por la que atraviesan es preocupante por qué tal parece que las autoridades municipales que encabeza José Villanueva Rodríguez, no le interesa el tema de la seguridad y hace caso omisión a una serie de ejecuciones que se han dado en pleno centro de Ocotlán de Morelos, que a dos cuadras del palacio municipal y a plena luz del día asesinaron a José Méndez Lara, quien era esposo de la exdiputada panista, Ivonne Gallegos Carreño.

Amador Hernández, denunció que está administración pública municipal se ha teñido de sangre, pues en el año pasado también mataron al exdirector de Obras, José Santos García y a la secretaría de Mercados, Abigail Selene Campos Hernández, respectivamente.

El líder del sector de mercaderes lamentó este escenario violento que viven los ciudadanos, situación que  “apareció de la nada hace dos años”, según alertó el también comerciante.

Comentó que de seguir está ambiente de violencia en esté poblado va ser necesario pedir refuerzos con la presencia de la Policía Federal y los militares.

Al destacar que se necesita que las autoridades municipales tomen en serio este problema de la violencia, la ola de robos a casas habitación, robos a transeúntes, ha comercios, ha autos, secuestros y ahora ejecuciones que no han cesado en las últimas fechas.

“Ocotlán se ha envuelto tan violento de manera tan repentina como en otros municipios del estado de Oaxaca”, pero necesitamos que las autoridades locales hagan algo al respecto y buscar estrategias para frenar la ola de violencia, reforzó el denunciante.

A lo anterior pidió a las autoridades municipales aumentar el cuerpo de la policía municipal pues apenas son como 20 uniformados que cuidan a un pueblo de unos 30 mil habitantes, esto es insuficiente para un pueblo que se ha envuelto violento.